Donar una vivienda es, a día de hoy, mucho más habitual de lo que era antes. En 2021 se registró un pico en su crecimiento, con un total de 25.000 donaciones de vivienda, una cifra que nunca antes se había visto desde que existen registros.
Por otro lado, a principios de 2022 entró en vigor el nuevo impuesto de Transmisiones, Sucesiones, Donaciones y Patrimonio, lo que pudo animar las donaciones de vivienda.
Así es el proceso de donación de una vivienda
Lo primero que debes de tener en cuenta es que para hacer una donación, el donante tiene que estar vivo. Esto es lo que diferencia a una donación de una herencia.
Además, el donante tiene que ser el titular de la vivienda, que tiene que estar libre de cargas. Adicionalmente, se supervisan otras cuestiones como, por ejemplo, el hecho de que el propietario esté al corriente de pago del IBI de la vivienda que donará.
A partir de este momento, el beneficiario de la donación (que puede ser un hijo o cualquier otra persona física o jurídica), tendrá que aceptar la donación y se realizarán unas nuevas escrituras ante notario.
De este modo, quedará constancia de que el beneficiario es el nuevo propietario y esto también deberá reflejarse en el Registro de la Propiedad.
Donar una vivienda a un hijo
En el caso de que los donantes sean los padres y el donatario el hijo, se tendrán que acreditar ciertas informaciones.
Será necesario que aporten una nota simple que certifique que los padres son titulares del inmueble. Esta se puede conseguir fácilmente en el Registro de la Propiedad.
También habrá que presentar las escrituras de compra de la vivienda y el último recibo del IBI.
Será necesario pedir cita con la notaría y comenzar con los trámites necesarios para realizar la donación.
Tendrán que presentarse ante notario tanto el donante como el donatario, en este caso, los padres y el hijo. Los padres harán constar su voluntad de donar la vivienda y el hijo tendrá que aceptar la donación. A partir de ahí, se firmará la escritura de la donación.
En este momento, tendrán que pagarse los impuestos relativos a la transacción y, a partir de ahí, el beneficiario de la donación (el hijo) podrá acudir al Registro de la Propiedad para registrar el inmueble a su nombre.
Con todo esto, se hará efectivo el cambio de titularidad tras la donación.
¿Cuánto hay que pagar para donar una vivienda a un hijo?
Donar una vivienda no está exento de impuestos.
Los padres que quieran donar una vivienda a un hijo deben de saber que, en la operación, se asumirán ciertas cargas fiscales por ambas partes.
En el caso del donatario, el hijo, el que recibe la vivienda:
- El impuesto de donaciones.
- El impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, es decir, la plusvalía municipal.
Estos impuestos se tendrán que liquidar en un plazo máximo de 30 días hábiles desde la firma de la escritura de donación.
En cuanto a los donantes, los padres, los que realizan la donación, si la vivienda donada tiene un valor superior al precio que pagaron por ella cuando la compraron, deberán declararlo como ganancia patrimonial en el IRPF.
Exenciones a los impuestos en la donación de vivienda
Existen dos excepciones que permitirán al donante ahorrar en impuestos:
- No se tendrá que pagar IRPF cuando el inmueble objeto de la donación sea la vivienda habitual del donante y este tenga más de 65 años.
- Cuando el donante se queda el usufructo del inmueble, donando sola la nuda propiedad, que se consolidará a la muerte del donante, tampoco se tendrá que pagar IRPF.
Como ves, donar una vivienda no es regalarla. Los impuestos a abonar dependerán del lugar en el que esté ubicada la vivienda.
Antes de decidirte por realizar o no la donación de una vivienda, conviene conocer bien el procedimiento, los requisitos y los costes asociados a la operación. Solo así podrás tomar la mejor decisión posible.
En Landa Propiedades somos especialistas en todo lo relacionado con la venta, compra, herencia y donación de viviendas. Ponte en contacto con nosotros si quieres que te ayudemos en el proceso.