¿Sabías que la decisión de comprar o no comprar una vivienda se hace en los primeros 90 segundos de una visita? Y es que, a la hora de vender una vivienda, eso de que «no hay una segunda oportunidad para causar una buena primera impresión» es muy cierto.
A continuación te damos unos consejos para que tu vivienda luzca su mejor versión y consigas venderla rápido y al mayor valor posible.
Las visitas a tu vivienda de posibles compradores se trata, sin duda, de un momento crucial en el proceso de venta.
Normalmente, el comprador ya ha visto la vivienda virtualmente o en fotografías y se lanza a conocerla en persona, probablemente, porque ha despertado su interés. Es muy importante que sepas aprovechar y obtener ventaja de este momento.
Recuerda que una correcta valoración de tu vivienda es de vital importancia a la hora de iniciar el proceso de venta.
¿Cómo preparar tu vivienda para la visita de compradores?
A continuación, te contamos cómo puedes mejorar el aspecto de tu vivienda con unas simples acciones y sin necesidad de mucho presupuesto. Si lo pones en práctica, verás cómo la apariencia general de tu vivienda mejora notablemente.
- Retira los objetos personales: Despersonaliza todo lo posible. Piensa que la decoración es algo muy personal. Procura que el espacio quede neutro y libre de objetos. Permite que el posible comprador se sienta cómodo y se visualice en el espacio sin distracciones.
- Repara pequeños desperfectos: Haz un mantenimiento básico de bombillas, grifos, persianas, manchas en la pared… Haz una revisión profunda de tu vivienda e identifica los elementos que podrían mejorarse fácilmente y con poca inversión.
- Ordena y limpia todo lo posible: Conseguirás causar una mejor sensación y que el espacio parezca más grande y amplio. No olvides limpiar bien zócalos, enchufes, juntas de baldosas…
- Cuida especialmente el baño y la cocina: Estas dos estancias deben de estar muy limpias, bien recogidas y sin olores. Guarda en los armarios todo lo posible, retira imanes de la nevera, quita los objetos de higiene personal del baño y coloca toallas limpias y nuevas.
- Ten los armarios y el trastero bien ordenados y limpios: Tu posible comprador podría estar interesado en conocer la capacidad de los armarios y en visitar el trastero de la vivienda. No caigas en la tentación de esconder y amontonar allí todos los objetos que quieras que no estén a la vista.
- Ventila bien todas las estancias: El aire que se respire al entrar en tu vivienda tiene que ser fresco. Trata de evitar que exista cualquier tipo de olor. También puedes colocar ambientadores adecuados a cada estancia, pero cuidado, elige siempre olores suaves y neutros.
- Deja que entre la luz natural: Sube todas las persianas y, si ves que no hay suficiente luz, enciende las luces. Intenta programar las visitas a la hora en la que entre mayor cantidad de luz en tu vivienda.
- Cuida las zonas exteriores: Dale al jardín, terraza o balcón la importancia que merecen. A menudo nos centramos en el interior de la vivienda y tendemos a descuidar el exterior, especialmente si estamos en invierno.
Si quieres que te ayudemos a preparar las visitas de posibles compradores, así como con todo el proceso de venta de tu vivienda, ¡ponte en contacto con nosotros!
Recuerda que, contar con el apoyo y asesoramiento de un experto inmobiliario, puede ayudarte a sacar el máximo potencial a tu vivienda y, por tanto, el máximo beneficio en la operación.
La decisión de comprar de una vivienda se toma en un 30% con la razón y en un 70% con el corazón.
